La impotencia sexual no es simplemente una parte del envejecimiento que está obligado a aceptar. Los hombres que padecen disfunción eréctil tienen para considerar varias opciones de tratamiento para la disfunción eréctil, dependiendo de cuál sea la razón de su impotencia. Cuanto antes se informe sobre las alternativas de tratamiento para la disfunción eréctil, antes podrá volver a compartir y disfrutar los momentos de intimidad con su pareja.
Opciones de tratamiento de la impotencia sexual
Cuando realiza una consulta para conversar sobre la impotencia sexual con su médico, este le explicará sus opciones y le ayudará a decidir qué es lo mejor para su situación en particular. Puede sugerirle hacer cambios de estilo de vida, probar un tratamiento con medicamentos o la colocación de un implante de pene.
Cambios de estilo de vida
Los mismos consejos de estilo de vida saludable que su médico le ha estado recomendando por años también pueden ayudarle a tratar su disfunción eréctil:
- Dejar de fumar
- Reducir el consumo de alcohol
- Bajar de peso
- Hacer ejercicio con regularidad
- Reducir el estrés
Estos pasos no son una solución instantánea, pero ayudarán a mejorar su circulación de la sangre y funcionamiento de los nervios. Esto debería darle más energías y, en el proceso, puede ayudar a reducir la gravedad de su impotencia.
Si tiene problemas para mantener estos objetivos, pídale a su cónyuge o pareja que se una a usted. Volverse más saludables juntos y probar cosas nuevas como pareja pueden ser una excelente experiencia de unión que fortalecerá su relación.
Tratamiento con medicamentos
Cuando los cambios de estilo de vida solos no dan resultados, por lo general, el siguiente paso es el tratamiento con medicamentos, pero está lejos de ser la única opción, y puede no ser lo mejor para usted.
El tratamiento con medicamentos implica riesgos de efectos secundarios tales como dolores de cabeza, dolor de espalda, malestares estomacales o sensibilidad en los músculos. También debe suministrar a su médico una lista completa de los medicamentos que esté tomando, incluidos suplementos dietarios. La Hierba de San Juan, los antibióticos y los medicamentos para la presión arterial son solo algunos de los muchos medicamentos que pueden causar una interacción nociva.
Además de las píldoras, se pueden usar inyecciones para tratar la disfunción eréctil. Se administran fácilmente, pero pueden producir cicatrices y erecciones dolorosas.
Un supositorio uretral también se puede usar para tratar la impotencia sexual. Viene en empaques envueltos individualmente que incluyen un aplicador de plástico desechable. Los efectos secundarios comunes incluyen dolor en el pene o los testículos, sangrado uretral y sensación de ardor en la abertura uretral.
Bombas de pene
También llamadas dispositivos de constricción al vacío, las bombas de pene son dispositivos que se colocan sobre el pene para llevar la sangre hacia el cuerpo del pene. Una vez que el vacío produce una erección, la banda de retención se desliza hacia abajo hasta el extremo inferior del pene, y la bomba se quita. Puede dejar la banda colocada hasta por 30 minutos.
Las bombas pueden ser manuales o funcionar con baterías. Para evitar una lesión accidental en el pene, una bomba de pene de venta libre debe incluir una función de “liberación rápida” que permita una liberación rápida del vacío.
Tratamiento de la impotencia sexual con implantes de pene
Cuando otros tratamientos no han surtido efecto, un implante de pene puede ser la solución perfecta. Un implante de pene es un dispositivo médico que se coloca quirúrgicamente en el pene para producir una erección con un aspecto y una sensación natural. Los implantes se adaptan a su propia anatomía. La sensibilidad y la capacidad de eyacular por lo general tampoco se ven afectadas, de modo que podrá tener un orgasmo normalmente (a menos que tenga una afección médica que impida esto).
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Cobertura de seguro para el tratamiento de la impotencia sexual
Cada política es algo diferente, pero la mayoría de los proveedores de seguro ofrecen algún tipo de cobertura para el tratamiento de la impotencia. Los implantes de pene, por ejemplo, son cubiertos por la mayoría de las aseguradoras y por Medicare cuando se determina que son médicamente necesarios para un hombre que no ha obtenido resultados con otras alternativas. El especialista en reembolsos en el consultorio de su urólogo también puede ayudarle a determinar los detalles de su cobertura.